Aún existen personas que no se atreven a utilizar las redes sociales de manera profesional, o tan solo no se atreven a abrirse un perfil online para no dejar huella digital. Por lo que podemos decir que el miedo escénico también se ha trasladado al mundo digital.
En cierto modo, diría que todos podemos tener nuestras batallas internas que nos limitan a demostrar todas nuestras destrezas, habilidades y potencial, pues no queremos arriesgarnos a la crítica o al rechazo por la exposición de nuestras ideas. Y la verdad es que si no asumimos riesgos, ni crecemos, ni experimentamos, ni evolucionamos.
Así que a continuación te doy algunas razones por las cuales te estás perdiendo valiosas oportunidades de ser encontrado.
Tu público objetivo:
Ese que necesita saber que existes, y al que necesitas aportar tus ideas.
Resulta que se vive con tanto miedo a decir ‘algo malo’ que muchas veces perdemos el norte, en este caso, el público ideal. Si pretendes complacer a todo el mundo, pues me permito decirte que es imposible.
¿Cuál es tu público ideal? ¿A quiénes tienes que decirles lo que quieres decir? ¿Qué crees que puedes aportar? ¿Cómo puedes ayudarles? Afina tus mensajes enfocados en sus problemas, cuando lo hagas llegarás a quiénes tienes que llegar. Entonces cada contribución que hagas alimentará tu ‘Know How’ y confianza.
Experiencias adquiridas, conocimientos y habilidades:
Probablemente has marcado la diferencia en tu empresa, en tu sector o en tu entorno, más de lo que crees. Ten presente que lo que es obvio para ti no es evidente para el resto.
¿Solucionaste algún proceso que estaba estancado? ¿Participaste en el desarrollo de nuevos proyectos? A veces tomamos por sentado algunas experiencias sin enterarnos de que para otros es toda una novedad.
Las personas están ávidas de contenido, son olvidadizas y necesitan recordatorios.
Las discrepancias ayudan a ampliar pensamientos y a evolucionar ideas:
Si las personas no están de acuerdo con lo que dices, esto no significa el final de tu reputación. El solo hecho de poder obtener diversidad de opiniones refuerza tu ‘Know How’ y confianza. Aprender cómo opinan los demás y saber llevar la curva de aprendizaje.
Con esto no pretendo decir que debes modificar tus ideas en pro de las discrepancias, la pluralidad nos permite profundizar y tener una mente más abierta. Maneja los desacuerdos con gracia y sabiduría.
Los errores son positivos:
Los desaciertos son un medio de aprendizaje constructivo, la gente te puede corregir y el mundo sigue girando. Estar equivocado en un punto, no te hace estar equivocado en todo. Así que, corregir el error y seguir adelante.
Participa en las redes sociales y deja que te encuentren, te sorprenderás de las conexiones que puedes crear, de la cantidad de personas a las que puedes ayudar y de cómo tu reputación crece en positivo a través de la confianza que ganarás por tus seguidores.
¿Necesitas más motivos para comenzar a actuar en las redes sociales?