Mollet del Vallès es un municipio de la comarca del Valles Oriental de la provincia de Barcelona, y desde que estamos viviendo el período denominado “crisis” he podido observar el cierre de diversidad de empresas en la zona, desde peluquerías, panaderías, pescaderías, bares, tiendas de ropa, etc. Lamentablemente muchos se han visto afectados por este fenómeno tan depredador de los negocios y que tanto afecta el presupuesto familiar.

No obstante también es cierto que aún existen otros que tienen años funcionando, conservando su “clientela” aún, su “posicionamiento” y sus “estrategias”. Mientras que también tenemos a aquellos que se han “atrevido” a adentrarse en el mundo del emprendimiento, materializando sus sueños, abriendo sus puertas al mundo de los negocios dentro de un mercado más que competitivo, retador con el factor de la “crisis”, y que muy probablemente puede que estén rasgando con las uñas su economía, pero que continúan manteniendo a flote la embarcación contra viento y marea.

Muchos acuden a las estrategias más básicas, por ejemplo el nuevo bar de tapas sabe que abrió sus puertas al lado del “monstruo” del pueblo, el más concurrido, y sin embargo ahí está dando la batalla, sacando del día a día sus promociones en menú que le hace contar con un promedio de entre 10 a 15 clientes al día y muchos más cuando se emite un partido de fútbol.

Pero también está la nueva heladería, que aunque ahora no es su mejor temporada, pues hacen su propio pan, además del café y alquilan su pequeño espacio para el cumple del peque. Por otro lado está la nueva peluquería, más grande en cuanto a espacio físico y que promocionan sus servicios con ofertas muy tentadoras. Las nuevas tiendas de ropa, con ofertas sumamente tentadoras en ropa para él y para nosotras. O la nueva tienda de ropa para niños y niñas, que también ofrece arreglos de ropa.

Tampoco es de menospreciar las estrategias de los que ya tienen más tiempo radicados con sus negocios, como la peluquería canina que adicionalmente además de vender accesorios para nuestros incondicionales amigos cuatro patas (ropa, colonias, champú, pienso, etc), pues por cada compra que hagas puedes sumar cupones de descuento para otras futuras compras. O la peluquería/boutique que mala estrategia no es, eso de que mientras te hacen la manicura o el corte de pelo puedas ir viendo el mejor vestido que te hará lucir tu nuevo look.

Y por último, sólo me queda mencionar la tienda de ropa más cercana que tengo, que no por ser seguidora de Levi’s, siempre tiende a ser la primera que visito antes de irme por las del resto del pueblo, además de vender Levi’s también tiene buenas marcas como Lois. Dicho sea de paso es obvio que su dueño conoce su sector y sabe lo que te va bien y lo que no, de todas maneras creo que es meritorio que mencione que además de carisma y buena atención, al menos a mí de la oportunidad de que si quiero probarme algo que me guste lo puedo hacer en la comodidad de mi casa, esto es VENDER.
Las estrategias de la crisis
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